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¿Y tú por qué tienes sexo?
Tenemos sexo porque queremos, porque alguien nos gusta, alguien nos excita, porque el sexo es divertido y placentero... Estas razones básicas tienen su origen en la fisiología de nuestro cuerpo y la psicología de nuestro deseo. Si te gusta la perspectiva evolutiva, estas son las razones por las que puedes oler el suelo húmedo y el fuego, razones que se remontan a la época de 'cuando todos vivíamos en cuevas'.
No creo que haga falta convencer a nadie de que, desde entonces, el tema del sexo se ha vuelto muy complicado. Hoy en día, las razones por las que tenemos sexo con otras personas son mucho más variadas.
POR QUÉ LA GENTE TIENE SEXO
En un estudio de 2007 titulado "¿Por qué los humanos tienen sexo?" se preguntó a más de 1.500 personas por qué tenían relaciones sexuales. Los encuestados eligieron entre 237 razones diferentes (identificadas previamente no por científicos, sino por otro grupo de encuestados).
Las razones más mencionadas resultaron ser:
♥ Me atraía la otra persona
♥ Quería experimentar placer físico
♥ Porque el sexo es divertido
♥ Me gustaría mostrarle a la otra persona algo de ternura
♥ Quería mostrarle amor a la otra persona
♥ Estaba estresado y quería liberar tensión
♥ Tuve el deseo
♥ Quería tener un orgasmo
♥ Quería satisfacer a mi pareja
♥ Quería experimentar la cercanía
♥ Quería puro placer
♥ Porque el sexo es excitante, es una aventura
♥ Quería sentirme conectado con la otra persona
♥ La segunda persona era físicamente atractiva
♥ La otra persona me queria
♥ La segunda persona me hizo sentir sexy
Se dice que "las mujeres y los hombres quieren cosas completamente diferentes del sexo". Pero si quieres desafiar este estereotipo, todo lo que tienes que hacer es prestar atención a este estudio: las listas de razones dadas por mujeres y hombres eran casi las mismas, solo con ligeras diferencias en el orden de los elementos.
Entonces, escribiré sobre lo que la gente quiere del sexo, porque resulta que la forma de los genitales y la identidad de género no nos convierten en especies que viven en diferentes planetas en este sentido. Así que, los invito a venir desde Marte y Venus de regreso a la Tierra.
RAZONES Y OBJETIVOS PARA TENER SEXO
Echa un vistazo a la lista de arriba de nuevo. Observa cuántas razones comienzan con la palabra "quería...".
¿Qué significa eso? Que además de los motivos que nos empujan a tener sexo, también tenemos metas que queremos alcanzar con la ayuda del sexo. Si lo miras de cerca, entre las 16 'razones' enumeradas, tenemos al menos 12 objetivos. Ante la pregunta '¿por qué tienes relaciones sexuales?', los encuestados respondieron en su mayoría a la pregunta '¿por qué tienes relaciones sexuales?'.
Hoy, nuestras expectativas de sexo son quizás mayores que nunca. Queremos que el sexo no solo nos dé placer físico, sino que muchas veces también sea un símbolo de amor, fortalezca el apego, nos haga sentir queridos, deseados, amados... que confirme nuestro valor como pareja y amante/s y ayude a mostrar nuestros sentimientos. Esto puede suceder por diferentes razones: para que otras personas sse emocionen, para dar una sensación de frescura, para ayudar a aliviar el estrés y la tensión, para darnos alegría, para alcanzar una sensación de plenitud y felicidad, entre otras. También puede ocurrir que tengamos relaciones sexuales para evitar conflictos, para demostrarnos a nosotros mismos que merecemos amor, para lastimar a alguien o incluso para evitar responder preguntas difíciles.
Así que, hoy queremos mucho del sexo. ¡Pobre sexo! ¡Él tiene tantas de nuestras necesidades que satisfacer! Además, nuestras metas y necesidades pueden cambiar muchas veces en el curso de nuestras vidas con nuestro desarrollo, cambiando las prioridades de vida, dependiendo de la etapa de la relación en la que nos encontremos o nuestro estado de ánimo. Y la principal dificultad puede ser que (como ocurre en otros ámbitos de la vida) es mucho más difícil satisfacer tus necesidades cuando no sabemos cuáles son.
Por eso hoy te pregunto: ¿por qué tienes sexo?
CUÁL ES LA CLAVE PARA LA FELICIDAD SEXUAL
En nuestro trabajo con clientes, la respuesta a esta pregunta suele ser la clave para la felicidad en el sexo en pareja.
Uno de los problemas con los que nos encontramos más frecuentemente es la 'desigualdad sexual' entre parejas regulares. Por ejemplo, alguien quiere ser azotado, pero su pareja preferiría que él le diera un masaje. Si contamos el número de veces que ninguno de los dos recibió un azote o un masaje, tendremos como resultado semanas, meses, o incluso años, de frustración al cuadrado.
Pero a fin de cuenta, resulta que a ambos lo que de verdad les gustaría es sentirse más deseables en la cama. Y se sorprenderían al saber de que detrás de su 'desajuste' se encuentre una misma necesidad. De repente, la experiencia de la compasión prevalece sobre el conflicto de 'nalgadas o masajes', y es mucho más probable que ambos puedan complacerse mutuamente.
Entonces, para poder encontrar tu necesidad (real) y descubrir si es la misma que la de tu pareja, tendrían que responder previamente a una pregunta básica:
¿Para qué tienes sexo?
Claro, es importante saber lo que quieres hacer en la cama y poder decir "quiero que me azotes" o "¿me masajeas el interior de los muslos?", pero es la conciencia de estas necesidades básicas y fundamentales que queremos satisfacer con el sexo, que es el portal para la autocomprensión y la búsqueda de la felicidad sexual. La capacidad de comunicarlos, a su vez, nos permitirá conocernos mejor como seres sexuales y puede acercarnos incluso si queremos hacer cosas diferentes en la cama.
Y sí, requerirá abrirse, primero a ti ismo, luego a otra persona. Exponerse a ser lastimado, permitiendo que otra persona vea dentro de ti, valdrá la pena.
CÓMO MEJORAR LA VIDA SEXUAL EN PAREJA
¿Estás listo para responder a esta pregunta mágica? Si es así, te invito a completar esta tarea:
Toma una hoja de papel en blanco y algo para escribir. Configura una alarma en tu teléfono durante 15 minutos.
En la parte superior de la página, escribe el principio de la oración: Quiero tener sexo para...
Completa la oración de tantas maneras diferentes como puedas. No te censures. Anota cualquier cosa que te venga a la mente. No dejes de pensar en las siguientes frases hasta que suene la alarma.
Lee tu lista de oraciones desde el principio con una mirada fresca. ¿Hubo algo inesperado para ti? ¿Alguno de tus objetivos se puede unificar con otro? ¿Cuál es la principal necesidad por la que quieres tener sexo? ¿Está satisfecho?
Finalmente, subraya 3 oraciones que describan las necesidades que deseas poder compartir con tu pareja. Lee estas oraciones en voz alta. Otra vez. Y una vez más. Léelos en voz alta hasta que los sonidos comiencen a desdibujarse, hasta que sean lo suficientemente repetitivos como para aburrirte. Repite esta parte de la tarea luego de unos días después.
Y la próxima vez que surja la oportunidad, di una de estas frases en voz alta a tu pareja.